Otoño en Roma
Cada ciudad, cada pueblo exhala un aroma peculiar. La ciudad de Roma, casa su verdor lleno de desniveles sugerentes con las calles cosmopolitas, bulliciosas y modernas. Esta semana de atrás, disfrutando en la 'ciudad eterna', el contraste de las numerosas iglesias de la urbe de Pedro con tiendas y restaurantes infinitos, nos recibió con amabilidad antigua. La ciudad se siente cercana pronto, no sobrecoge con la grandiosidad de París ni es tan ruidosa como Madrid. Tal vez, la quietud intensa de sus miles de piedras históricas da un sosiego que entra en nosotros y nos acoge. Después de haber recorrido en dos años París, Budapest, Estambul y Roma, tal vez sea esta última el 'modelo' de ciudad que mas me atrae para vivir en una ciudad. Claro que hablo de la Roma central, imagino que todas las afueras de las urbes modernas resultan deshumanizadoras por igual. Si en mayo, Estambul nos sorprendió con el cántico melodiosa de sus mezquitas, Roma te baila e